Nombre: Café, té, guaraná, nuez de cola, bebidas de cola, bebidas energéticas, cacao o chocolate, cafeína.
Principio(s) activo(s): Cafeína.
Clasificación:Estimulante
Presentación(es) común(es): La presentación del café puede darse en granos de la planta de café, tostados, o esos mismos granos en forma de polvo tras haberlos molido. El té, con sus distintas variedades, son las hojas secas de un arbusto, normalmente reducidas a trozos pequeños. El guaraná es un fruto comestible -que se da en algunos países de Sudamérica- y se usa para hacer bebidas y otros alimentos, por su contenido en cafeína. La nuez de cola es otro fruto con un alto porcentaje de cafeína en su peso, que todavía está presente -especialmente como saborizante y aromatizante- en las bebidas de cola. El cacao o chocolate presenta también cafeína con dosis más altas en el chocolate negro. Las bebidas energéticas (tipo Red Bull, Monster, Burn) son bebidas edulcoradas (tipo refresco) con un alto contenido en cafeína. Las bebidas de cola (tipo Pepsi o Coca-Cola) contienen también cafeína pero en menor proporción que las energéticas, el té o el café. La cafeína pura es un polvo blanco, amargo de sabor, en apariencia indistinguible de otros compuestos.
Historia: La relación del ser humano con la cafeína en sus distintas formas data de antes de la era cristiana en China con el té, del siglo XV con el café en el mundo árabe, y en nuestra época la tenemos presente también en las bebidas de cola y energéticas. Es un adulterante frecuente de ciertas drogas, como el speed, la heroína -aunque suene contradictorio-, cocaína o éxtasis (MDMA). Es la droga psicoactiva más consumida a día de hoy por el ser humano, por delante de tabaco y alcohol.
Forma, dosis y consejos de reducción de riesgos en su consumo: el consumo más común de cafeína en nuestra sociedad se da en el café, que es una de las drogas legales de las que tenemos integrado su uso -como estimulante- en nuestra cultura. El té es la otra forma de consumo más tradicional, y si bien el té tiene mayor proporción de cafeína por peso que el café, la cantidad usada suele ser mucho menor. Como regla a ojo, se puede calcular que un café tiene entre 60 -uno corto- y 150 -uno largo- miligramos de cafeína, más que un té y que las bebidas de cola. Las bebidas energéticas tienen oscilaciones muy grandes en su composición, con algunas conteniendo varias veces la cantidad de cafeína en proporción a otras pero debe venir indicado en miligramos o en porcentaje en su etiquetado.
Efectos: la cafeína es un estimulante del Sistema Nervioso Central, aumenta el latido cardíaco, la presión arterial, el metabolismo basal, el estado de vigilia y la atención. Las dosis óptimas para cada persona varían según la tolerancia individual al fármaco y la costumbre de uso, pero el efecto de un café “que te despierte un poco” puede estar alrededor de los 120 miligramos de cafeína. Tomar más de un café, ayudará a mantenerse despierto y volverá a estimular todo el sistema, pero según aumentamos la dosis las sensaciones que provoca la cafeína son más parecidas a la ansiedad y al nerviosismo que al placer. Las presentación de cafeína en farmacia –Durvitan en España- tiene 300 miligramos pero son de liberación prolongada.
Riesgos: los riesgos de la cafeína son los derivados de sus efectos como estimulante del sistema nervioso central y en concreto del trabajo cardíaco, por lo que hipertensos y personas con ciertas patologías vasculares deben moderar su consumo para no agravar condiciones pre-existentes. Es un droga adictiva, llegando a presentar efectos paradójicos en sus más férreos consumidores, como no poder estar tranquilo -o incluso dormir- sin una buena dosis de cafeína antes. Pasando del medio gramo de cafeína ingerida de una vez, es posible verse ante un cuadro de taquicardias y ansiedad, y llegando al gramo, efectos como luces que cruzan nuestro campo visual, desorientación, sonidos extraños, y reacciones de nerviosismo extremo -manía y/o paranoia- son comunes. El consumo de más de 1 gramo de cafeína por día es una adicción conocida como cafeinismo. La dosis letal de la cafeína se estima en unos 70 cafés (para un humano de 70 kilos) o su equivalente en cafeína (unos 7 gramos) pero no resultan extrañas muertes con dosis más bajas.
Estatus legal en España: Legal, de venta libre.