Por Myta
Esta sencilla receta hará las delicias de tus comensales. Hemos querido comenzar este recetario con algo asequible en elaboración pero contundente en sabor.
La mezcla del chocolate y la fresa combinan a la perfección. Aquí hemos utilizado unos moldes con forma de corazón para que cada comensal tenga su corazoncito marihuanero.
Para 4 personas.
Ingredientes para el bizcocho:
• 3 huevos
• 1 yogur de fresa (se puede utilizar uno de limón o natural)
• aceite de oliva (1 medida del yogur)
• azúcar (2 medidas de yogur)
• harina (3 medidas de yogur)
• chocolate en polvo (1 medida del yogur)
• 1 sobre de levadura (hay una harina especial para bizcocho que ya contiene levadura)
• 1 limón
• azúcar glas
• harina y mantequilla para untar el molde
• mantequilla cannábica (esta receta no lleva una medida exacta de mantequilla. Debes calcular que cada porción contenga 0,5 gr. de marihuana, siempre hay tiempo de aumentar la medida. Por eso, es mejor hacerla concentrada y si necesitas gran cantidad para la elaboración de la receta, completas lo necesario con mantequilla normal)
Preparación:
Bate bien los huevos con una varilla o en su defecto con una cuchara de madera y a continuación añade el azúcar, removiendo la mezcla. Introduce el yogur y el aceite y sigue batiendo. Es fundamental que los ingredientes queden bien mezclados. Lava el limón y ralla la cáscara sin llegar a la parte blanca, ya que si lo haces te imprimirá un sabor amargo. Agrega el chocolate en polvo.
Tamiza (pasa por el colador para que coja aire) la levadura y la harina sobre la masa y mezcla bien. En este punto puedes hacer dos cosas; o bien agregar la mantequilla cannábica a la masa o utilizarla para untar el molde y si te sobre algo mezclarlo con el resto.
Es importante que después de untar el molde con la mantequilla, lo espolvorees con harina, de lo contrario se te quedará pegada la masa.
Introduce en el horno (previamente calentado) a 180ºC durante 40 minutos. Una vez horneado, deja que se temple para pasar a desmoldarlo con la ayuda de un cuchillo.
Espolvorea el bizcocho con un poco de azúcar glas y sírvelo junto con un poco de salsa de fresas. Puedes acompañarlo con un par de fresitas naturales.
Consejo:
Si no tienes azúcar glas, puedes pasar la normal por un molinillo de café o una batidora.
Salsa de fresas:
Esta salsa de fresas sirve para acompañar numerosos postres. Helados, yogur, dulces, todo a lo que quieras darle un toque de distinción. Puedes utilizar otras frutas e ir cambiando el sabor para combinar.
• 500 gramos de fresas
• 4 cucharadas soperas de azúcar
• una taza de agua
• Jugo de un limón
Corta en láminas todas las fresas. En una cacerola, mezcla todos los ingredientes y déjalos cocer a fuego medio durante media hora. Una cucharadita de harina hará espesar la salsa. Batir y listo. Puedes servirla fría o caliente. Mantener en la nevera.