Los cultivos ilegales de marihuana y las conexiones fraudulentas a la red eléctrica en algunos barrios de la ciudad andaluza están ocasionando problemas en el abastecimiento eléctrico.
Tal y como informaban esta semana medios como La Vanguardia o Cadena Ser, los problemas de suministro eléctrico se centran en el distrito Norte de la ciudad, formado por los barrios de Campo Verde, Cartuja, Casería de Montijo, Joaquina Eguaras, Parque Nueva Granada, La Paz, Rey Badis y Almanjáyar. En éste último barrio es donde más cortes de luz están sufriendo desde hace varios años, y según la concejala de Medio Ambiente, Telesfora Ruiz, todo apunta a que estos problemas de suministro se deben a los cultivos ilegales de marihuana “que se han convertido en una plaga en esos barrios de la ciudad”. La concejala incluso apunta a mafias que están expulsando a los inquilinos de ciertos edificios, donde instalan sus “plantaciones” llegando a generar consumos exagerados. Afirma que un único piso puede generar un consumo equivalente al de un bloque entero de viviendas.
Los responsables del gobierno local y de la compañía suministradora, Endesa, se han reunido en varias ocasiones para intentar encontrar una solución al problema, pero ya no saben cómo poner freno a una situación que escapa a su control y que se agudiza con la llegada del frío y el consiguiente aumento de la demanda energética en las viviendas.
A nosotros, así a “bote pronto”, se nos ocurre una posible solución, pero estamos seguros que no se acerca ni de lejos a las “soluciones” que barajan las autoridades y directivos de la empresa suministradora. Ellos pensarán más en actuaciones policiales, judiciales y de índole represiva, como viene siendo costumbre. Acciones que ya han llevado a cabo, pero que son totalmente inútiles como ya han podido comprobar. «A las pocas horas de concluir una intervención policial o judicial, la situación vuelve a repetirse. Es un problema que se mantiene por muchas intervenciones que se hagan. Casi no se le puede poner freno y por eso es preciso un compromiso real y efectivo, en el día a día, de todas las administraciones competentes y de la empresa de suministro«.
Suponemos también que ni se les habrá pasado por la cabeza que afrontar esta situación desde un enfoque distinto podría ser mucho más eficaz. Ya sabéis, lo que viene siendo afrontar la situación con valor y determinación, y apostar por una regulación seria del “problema” de las drogas, que desde luego, nos parece la forma más efectiva de luchar a largo plazo contra el mercado negro, el auténtico origen de este problema. Un problema local, en este caso, que requiere de soluciones más globales…