Por Eme
La Federación de Asociaciones Cannábicas de España es una agrupación de diversas asociaciones de usuarios de cannabis de todo el territorio nacional que comparten ideas en torno a la regulación, buscando siempre un fin social. Todas las agrupaciones pretenden lograr que cualquier usuario de cannabis pueda acceder a él de forma segura, respetando sus derechos y alejándolo del mercado negro.
Como uno de los principales actores que abren un debate público sobre la participación de la sociedad civil en el diseño de las políticas de drogas, desde Cannabis.es los hemos entrevitado para difundir su visión y el papel que hacen mediante las asociaciones de consumidores o clubes cannábicos. Además, la FAC participa en parlamentos autonómicos, nacionales y europeos, foros internacionales, talleres, debates e intervenciones en medios de comunicación, y nos parecía interesante conocer su visión sobre el panorama político actual español en relación al cultivo, consumo y uso del cannabis, y de las últimas Iniciativas Legislativas Populares (IPL) que se han desarrollado, especialmente de la de RCN-NOK, que no ha estado exenta de cierta polémica.
Comencemos pues por el principio, y vamos allá con las preguntas.
Para los no especializados, explicarnos brevemente qué es una asociación cannábica ¿son legales las asociaciones cannábicas?
A grandes rasgos, somos organizaciones sin ánimo de lucro integradas por personas mayores de edad y en pleno uso de sus facultades psíquicas, consumidoras de cannabis que nos organizamos para gestionar ese consumo de una forma más satisfactoria y de manera alternativa al mercado negro.
En cuanto a si somos o no legales, definitivamente la respuesta es SI, el código penal, a instancias de los tratados internacionales, no persigue en ningún caso el consumo ni las actividades encaminadas a satisfacer ese consumo y esa es exactamente la situación en la que nos encontramos: grupos cerrados de consumidores que se organizan para cubrir sus necesidades mediante autocultivos colectivos.
¿Por qué la policía actúa contra las asociaciones y clubes?
El modelo asociativo se basa en una autorregulación que, en mayor o menor medida, ha sido avalada dentro del Estado español por tribunales de todo rango, incluyendo el último reconocimiento en positivo por parte del T.S. de los denominados «autocultivos colectivos».
El problema surge al no haberse plasmado esta autorregulación, legitimada por más de 15 años de sentencias, en una acción normativa por parte de la Administración Pública que regule la actividad de estos colectivos.
Una normativa establecería exigencias de obligatorio cumplimiento así como protocolos de control que facilitarían la labor de las fuerzas de seguridad, por no hablar del alivio que supondría ante la indefensión que sufrimos miles de personas.
La consecuencia de tanta inacción es que en el momento actual, en incontables ocasiones, ante la falta de protocolos, se actúa contra grupos de consumidores tratándonos como casos de tráfico.
¿Con qué problemas se encuentran las asociaciones cannábicas?
A) Indefensión jurídica
– Ante el Poder Judicial: cambio de criterio según el momento, el lugar o la ideología de quién juzga.
– Ante la Fiscalía: cambio de criterio en función de quién esté en el Gobierno Central.
– Ante las Fuerzas de Seguridad: cambio de criterio según el poder político local, la comisaría o el propio agente.
B) La usurpación de identidad por parte de pseudo asociaciones daña la imagen de aquellas que si seguimos códigos de buenas prácticas.
C) Un problema clásico como era el habitual desinterés de los partidos políticos mayoritarios hacia nuestras propuestas históricas parece que puede estar siendo superado a día de hoy.
Hemos visto la presentación de la nueva FAC ¿Cuales son los nuevos objetivos y retos para este año?
Continuar creciendo en representatividad: estar cada vez en más territorios y con presencias más sólidas a través de federaciones territoriales.
Apuntalar los puentes abiertos con todas las formaciones políticas, tanto a nivel local y autonómico, sobre todo, y más últimamente nacional, en aras de avanzar hacia una solución que nos permita superar entre todos los oscuros tiempos del prohibicionismo.
Seguir generando y canalizando ilusión a través de un proyecto abierto y participativo gestionado entre iguales.
¿Qué puede hacer la nueva FAC para evitar la proliferación de bandas y asociaciones o clubs que se proveen en el M.N. y trafican?
Seguir con nuestro trabajo.
Por un lado, conseguir que el modelo de actuación que representamos, recogido en el Código de Buenas Prácticas, resulte lo más atractivo posible para ser replicado por aquellos grupos de consumidores que decidan organizarse mediante una fórmula asociativa.
Por otro lado avanzar en la solución de la tan deseada regulación del cannábis que recoja los derechos y las obligaciones de los autocultivadores, ya sean individuos o colectivos. Como decíamos antes, una regulación establecería exigencias de obligatorio cumplimiento para estos colectivos y facilitaría protocolos de control por parte de las fuerzas del orden orientados a valorar el cumplimiento de dichas exigencias.
Sabemos que en algunas asociaciones la democracia se ve vulnerada, al exigir a los nuevos socios que firmen -de antemano- una cesión de su voto para las asambleas generales (la junta de toda asociación) de manera que puedan controlar las decisiones que se toman, y un grupo de socios suficientemente grande pueda legalmente cambiar todo lo que quiera. ¿Eso es cierto? ¿Cómo lo ven, qué les parece?
Si ustedes lo saben será porque es cierto, no me consta pero le doy toda la credibilidad.
Es un atropello y una ilegalidad, debemos como individuos desarrollar el criterio suficiente como para valorar no participar en iniciativas que busquen anular de partida nuestra legítima capacidad de opinar y decidir.
Recomendamos denunciar este tipo de situaciones y buscar alternativas honestas que entiendan la participación transversal como unos de los principales recursos que aportan valor a proyectos de esta naturaleza.
En España ¿cuáles son vuestras expectativas y cual vuestro análisis de coyuntura política, creéis posible dar pasos hacia delante en cuanto a regulación con un gobierno en minoría de PP ya apoyado en muchas decisiones por el PSOE?
En ese sentido los hechos nos hacen ser optimistas ya que hay una manifiesta voluntad de «hablar del tema» por parte de la mayoría de la Cámara. Todos los partidos mayoritarios, excepto el PP, han manifestado su interés en tratar el asunto, destacando el carácter integral (recreativo y terapéutico) de las propuestas del PSOE, Podemos y ERC, quedándose más tacaña la propuesta de Ciudadanos al abordar sólo la vertiente terapéutica.
En definitiva esta corriente en la política nacional unida a la multitud de iniciativas reguladoras de ámbito local y autonómico indican que el problema de indefensión y de estigmatización de los consumidores de cannabis en nuestro país ha conformado una realidad social particular, esta realidad social ha alcanzado una dimensión tal que los políticos se están viendo obligados a abordar por fin el asunto.
Los activistas cannábicos en España están muy fragmentados ¿creéis viable que salgan adelante una ILP que represente a todo el colectivo?
Sin duda sería posible, una consensuada por los principales agentes involucrados tendría los apoyos suficientes. Otro tema sería la utilidad de la misma ya que por definición una ILP no puede cambiar Leyes Orgánicas y sería necesario matizar en su redacción algún artículo del Código Penal que es una Ley Orgánica.
Esta pregunta viene a cuento porque por ejemplo en el documento de la ILP que presenta RCN-NOK (partido político de ámbito navarro sin representación parlamentaria) dentro de la sección «Finalidad» ni siquiera se menciona el autocultivo o el cultivo, lo cual es extraño como poco. Se mencionan a las asociaciones, a los consumidores, a los socios o a las instituciones. Pero ni cultivo de cultivadores. ¿Qué está pasando con los 5 pilares de Regulación Responsable?
Las principales plataformas pro-regulación del Estado seguimos comprometidos con un modelo basado en los cinco pilares, es un documento, esta vez sí, nacido del consenso alcanzado por los principales actores involucrados en el proceso.
La ILP de RCN-NOK es una iniciativa particular que pretende desarrollar un modelo que entre otras cosas contemple un registro para individuos autocultivadores. No nos sentimos identificados ni con la representatividad de la propuesta, ni con la manera de llevar a cabo el trabajo, ni con el contenido del texto.
Desde la Confederación FAC entendemos el derecho al autocultivo individual, la piedra angular sobre la que se apoyan todas las demás posibles reclamaciones.