Benito Díaz
El nuevo informe científico presentado por expertos europeos afirma que los medicamentos con base de Cannabis son efectivos para el control del dolor neuropático crónico, incluso por encima de otros fármacos específicos para estos trastornos. Para ello, han creado un modelo de análisis multicriterio, incluyendo encuestas a pacientes sobre los efectos destacables de los tratamientos que siguieron.
El dolor neuropático crónico, es una patología derivada de un daño al sistema nervioso. Da lugar a una sensación de dolor agudo, que algunos pacientes describen como “descargas eléctricas”, pinchazos, enfriamiento o entumecimiento. Se trata de sensaciones que pueden y a veces llegan a entorpecer algunos momentos o incapacitar la vida en general de muchas personas. La dificultad de su tratamiento radica en lo delicado y desconocido del medio, ya que se trata de enfermedades que afectan a varios niveles del sistema nervioso, como el central, el periférico o una mezcla de ambos, siendo en muchos casos lugares de escasa información científica.
Este estudio, realizado por Nutt DJ, Phillips LD, Barnes MP, Brander B, Curran HV, Fayaz A, Finn DP, Horsted T, Moltke J, Sakal C, Sharon H, O’Sullivan SE, Williams T, Zorn G, Schlag AK (2021), y titulado “Un análisis de decisiones multicriterio que compara la farmacoterapia para el dolor neuropático crónico, incluidos los cannabinoides y los productos médicos a base de cannabis”, reúne a científicos especializados, psiquiatras, neurólogos y representantes de asociaciones de pacientes, y se analizan más de una decena de medicaciones, entre las que se incluyen analgésicos de origen opioide, antidepresivos, antiepilépticos, que fueron comparados con los mencionados medicamentos cannabinoides, tales como Sativex o Epidiolex, entre otros.
El estudio
El documento explica que existe un alto porcentaje de pacientes que recurren al Cannabis como paliativo del dolor, según las encuestas. También apunta que las conclusiones y análisis posterior de resultado sobre el uso de Cannabis, cannabinoides y medicamentos en base a la planta, en el control del dolor neuropático crónico (CNP por sus siglas en inglés), varían entre ser algo positivas, a no concluyentes o negativas.
“Los productos médicos a base de Cannabis (CBMP) están aprobados en más de 20 países, por lo tanto, son accesibles para cientos de millones de pacientes”, afirman los científicos. “Sin embargo, en algunos países, sobre todo en UK, las recetas están muy limitadas. Las razones de esto son variadas y complejas, incluyendo considerables obstáculos médico-legales y burocráticos, pero también reflejan una preocupación por parte de la profesión médica de que la base de evidencia de ensayos de control aleatorio para el cannabis medicinal es limitada y, para muchas de sus posibles indicaciones, no concluyente”. Asegura que esa actitud es opuesta a la de muchos pacientes que han probado estas terapias y que consideran el Cannabis como un añadido importante a su tratamiento
Las páginas revelan que los datos disponibles hasta el día presente sugieren que el uso de Cannabinoides es bastante seguro, “con poca evidencia del aumento del riesgo de experimentar eventos adversos graves, aunque los efectos adversos no graves (como mareo o somnolencia, por ejemplo), pueden ser comunes en el corto plazo después de su uso”. También resaltan que “a pesar del rápido aumento de la comunidad de pacientes, nunca se ha informado de una muerte por sobredosis, atribuida de forma directa al consumo de Cannabis en la literatura médica. Dado que muchos pacientes con dolor crónico, a menudo padecen múltiples comorbilidades (cohabitación de dos o más patologías, que suelen estar relacionadas), y la discapacidad física […] La consideración cuidadosa del perfil de seguridad es de crucial importancia y se necesitan mejores evaluaciones e informes de daños en los ensayos de dolor con Cannabinoides”.
Resultados
La muestra, obtenida a través del análisis de una matriz comparativa evaluada por un grupo de médicos y científicos en Inglaterra, Dinamarca, Israel y Alemania, algunos con experiencia en el campo de los cannabinoides y otros que no, en base a las impresiones de sus pacientes.
Así, utilizando una escala de 0 a 100, donde 0 serían los tratamientos menos efectivos y 100 los más efectivos, “los medicamentos a base de cannabis que consisten en Tetrahidrocannabinol / Cannabidiol (THC / CBD), en una proporción de 1: 1, lograron el puntaje general más alto, 79 (de 100), seguido por CBD dominante en 75, luego THC dominante en 72, La Duloxetina (antidepresivo) y los Gabapentinoides (anticonvulsivo) puntuaron en los 60, la Amitriptilina (antidepresivo), el Tramadol (analgésico opioide) y el Ibuprofeno (analgésico no-esteroideo) en los 50, la Metadona (opioide) y la Oxicodona (opioide) en los 40 y la Morfina y el Fentanilo (ambos opioides) en los 30. Los análisis de sensibilidad mostraron que incluso si la reducción del dolor y las puntuaciones de calidad de vida para el THC / CBD y el THC se reducen a la mitad, sus equilibrios entre beneficios y seguridad siguen siendo mejores que los de los medicamentos no cannabinoides”. Así, los efectos más valorados por los pacientes, serían la ganancia en calidad de vida, reduciendo el uso de opioides y otras medicinas que producen graves efectos secundarios, a la vez que reducen el dolor de forma efectiva.
La interpretación de estos datos refleja, a juicio de los expertos, “las deficiencias de los tratamientos farmacológicos alternativos con respecto a la seguridad y mitigación de los síntomas del dolor neuropático”. Reclaman más ensayos clínicos de máxima calidad y un registro integral exhaustivo de toda experiencia médica con cannabinoides, pues “estos resultados demuestran una vez más la complejidad y los mecanismos multimodales que subyacen a la experiencia clínica y el impacto del dolor”.
Controversia
El análisis incluye una reflexión que admite la existencia de discrepancias sobre los efectos de las moléculas del Cannabis en los receptores del sistema nervioso, pues es notable la complejidad de los mecanismos de estas áreas, ahora bajo investigación. “Se ha demostrado que los efectos analgésicos del THC pueden atribuirse más a sus efectos sobre los mecanismos cerebrales cognitivos emocionales superiores que a sus efectos sobre el procesamiento somatosensorial (antinocicepción). En el aspecto clínico, esto ha sido muy poco explorado […] La ausencia de investigaciones de calidad sobre estudios de calidad de vida es decepcionante y destaca la necesidad de recopilar mejores pruebas”. Añade que “El valor de los fármacos con Cannabis para el tratamiento del dolor sigue siendo polémico. Algunos pacientes y médicos lo prefieren a otros medicamentos, pero en el Reino Unido, la mayoría de los médicos son reacios a prescribir porque faltan recomendaciones basadas en evidencia de alta calidad y la experiencia clínica, y la educación y el apoyo son limitados. En ausencia de evidencia convincente, y ante el creciente uso clínico, es importante obtener las mejores estimaciones especializadas del valor de los medicamentos disponibles a base de Cannabis. En el mejor caso, esto se realiza aplicando nuestra matriz de análisis utilizando evidencia y juicios sobre la relevancia clínica de las pruebas, para determinar el balance beneficio-seguridad de los medicamentos”.