Arnau Alcaide
La administración de justicia del Estado recula en el proceso que había iniciado para desactivar el partido cannábico Luz Verde por un error de forma y una supuesta falta de actividad parlamentaria. La Fiscalía y la Abogacía del Estado actuaron después de un informe favorable del Ministerio de Interior, que promovió en noviembre el proceso de ilegalización, pero terminaron retirándose del proceso y favoreciendo su archivo.
El Estado se ha retirado de la acusación favoreciendo en los juzgados un procedimiento abreviado de archivo por «carencia sobrevenida de objeto» -que ya no hay demandante ni motivo de la demanda- que pone el punto y final a la casi ilegalización del partido y permite que pueda presentarse a las próximas elecciones.
Este mecanismo de ilegalización de partidos es popularmente conocido por las ilegalizaciones a la izquierda abertzale y se caracteriza por el informe previo de Interior, recomendando tal cosa en base a unos argumentos, que en este caso han sido los de la falta de actividad parlamentaria y un error de forma, seguido del levantamiento de la causa por Fiscalía y la Abogacía del Estado y ante la que cabe recurso, en este caso llevado a cabo por el abogado Bernardo Soriano, que ha permitido la victoria procesal a Luz Verde, ya sin el Estado como demandante.
Desde el partido Luz Verde han mostrado su indignación durante todo el proceso y manifestado que se registró una subsanación de sus estatutos dentro del plazo y días antes del levantamiento de la causa por la administración de justicia, además de repeler con hechos los argumentos de inactividad, pues presentaron una ley de regulación integral en el Senado y han mantenido su actividad en el parlamento de Navarra, de donde nace el partido cannábico con las siglas previas Representación Cannábica de Navarra.