Benito Díaz
El informe anual del Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones (OEDA) presenta en esta ocasión datos que vuelven a señalar al alcohol, el tabaco y los hipnosedantes con o sin receta como las sustancias con mayor prevalencia de consumo entre la población de entre 15 y 64 años. El cannabis y la cocaína, encabezan la lista de las sustancias ilegales más consumidas y llama la atención la confusión de términos en la lista de las Nuevas Sustancias Psicotrópicas (NPS).
El OEDA, organismo dependiente del Plan Nacional Sobre Drogas (PNSD), a su vez, subvencionado por el Ministerio de Sanidad, realiza actividades de recogida y análisis de datos y difusión de información, de carácter estadístico y epidemiológico desde 1998, sobre el consumo de sustancias psicotrópicas legales e ilegales. También analiza aspectos como la edad de comienzo en el consumo, diferencias entre sexos, intervenciones de urgencia, niveles de conocimiento del público al respecto de drogas, etc., mediante índices e indicadores de población.
El documento se apoya en encuestas anteriores, en concreto de la Encuesta sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias en España (ESTUDES) del año pasado y la información de la Encuesta sobre Alcohol y Drogas en España (EDADES), ambas incluidas en el texto de alrededor de 300 páginas.
Resumen general
Los datos, que analizan el año 2020, revelan que las sustancias con más prevalencia continúan siento las legales, Alcohol y Tabaco, seguidas de Hipnosedantes con o sin receta. Las que se comienzan a consumir de forma más temprana, son Tabaco y Alcohol, seguidas de Cannabis y Cocaína. La edad de inicio en el consumo se mantiene estable, alrededor de los 15 años. Por otra parte, las sustancias de inicio más tardío, son los Hipnosedantes y analgésicos opiáceos. Los documentos confirman un mayor consumo entre hombres, acentuadas en el caso del Alcohol, Tabaco y Cannabis.
Alcohol
Vino, cerveza y destilados, siguen ocupando el primer lugar de la lista, con un 77,2% de la población que dice haber consumido en los últimos 12 meses, el 63% en el último mes y el 8,8% de forma diaria en los mismos 30 días. Considerada por la OEDA como “sustancia psicoactiva”,
“La prevalencia de consumo de Alcohol, mantiene una tendencia estable y en niveles altos desde la década de los noventa. A destacar la tendencia descendente que existía de los bebedores diarios desde 2001, y que alcanzó a 2018 el valor mínimo de toda la serie histórica, incrementándose en más de un punto en el año 2020”, explica el dossier.
El 19,4% de los españoles de 15 a 64 años se ha emborrachado en el último año y el atracón de Alcohol (binge drinking), la técnica de no consumir de forma habitual, pero emborracharse, por ejemplo, los fines de semana, mantiene una tendencia ascendente desde 2007. En 2020, el 15,4% de las personas encuestadas ha consumido alcohol de esta forma en los últimos 30 días.
Tabaco
La segunda sustancia psicotrópica de mayor presencia en nuestro país, ocupa al 39% de la población de entre 15 a 64 años, un 32,3% de forma diaria. El dato ha disminuido desde 2018, pasando de 34,0% a 32,3%, retornando a las cifras que se registraban en 2005.
“En 2020, el 10,5% de la población de 15 a 64 años ha probado los cigarrillos electrónicos, y dentro de esta franja, el 48,9% ha usado cigarrillos electrónicos con nicotina, y el 24,3% fumó cartuchos tanto con nicotina, como sin nicotina. El uso de estos dispositivos en el último mes es más elevado en el grupo de 15-24 años”, aclara el informe.
Hipnosedantes
Benzodiacepinas, barbitúricos, antidepresivos y antihistamínicos, entre otras sustancias, son psicofármacos depresores del sistema nervioso central que producen sedación y sueño. Conseguidos con o sin receta, se estima que 645.000 personas empezaron a consumirlos en 2020, siendo el mayor inicio de consumo entre mujeres de 35 a 64 años. “El 22,5% de la población de 15 a 64 años ha consumido Hipnosedantes con o sin receta alguna vez, superando la barrera del 20% por tercera vez en toda la serie histórica. El 12,0% los ha consumido en el último año, el 8,6% en el último mes y el 6,4% diariamente en el último mes” confirma el estudio.
Cannabis
La marihuana sigue siendo la droga ilegal más consumida por la población joven. En 2021, el 28,6% confiesa haber consumido la planta alguna vez en la vida, el el 22,2% en el último año y el 14,9% en el último mes. “Entre los que consumieron en el último mes, el 2,1% de los chicos y el 1,1% de las chicas ha consumido 20 días o más. En 2021, han empezado a consumir cannabis 155.800 estudiantes de 14 a 18 años”, afirma la encuesta.
La tendencia descendente iniciada en 2006, ha continuado hasta 2021. “Sin embargo, se observa un pequeño repunte en el consumo problemático de cannabis entre los consumidores”, explican las hojas. “Los jóvenes tienen una baja percepción del riesgo asociado al consumo de cannabis, siendo, además, tras el alcohol y el tabaco, la sustancia psicoactiva percibida como más accesible por dicha población”.
El Cannabis es una de las sustancias que sale peor parada de este tipo de informes, dado que se le atribuyen consecuencias como el consumo problemático, sin atender a contextos, como las condenas judiciales que condenan a jóvenes a seguir tratamientos por consumo de drogas, o contar la Marihuana como presente en los casos de fallecimientos por “reacción aguda a drogas”, elevando la importancia de este psicoactivo y restándoselo a los porcentajes de Alcohol o Cocaína que llevaron a los fallecimientos en la realidad.
La OEDA cifra en 38.544 las admisiones a tratamiento por abuso o dependencia de drogas ilegales, una reducción del 23% con respecto al 2019 y lo atribuye a las restricciones impuestas por la epidemia de COVID 19. De ellas, 10.587 fueron por consumo de Cannabis, a juicio de los encuestadores. “Así, el 95,1% de todos los menores de 18 años que se han tratado por consumo de drogas ilegales en 2020 en nuestro país, lo han hecho por problemas asociados al consumo de Cannabis”. Sin embargo, “en 2020 la cocaína se mantiene como la droga ilegal que causó un mayor número de admisiones a tratamiento (45,4% del total), seguida del cannabis (27,5%) y los opioides (22,1%)”.
La mortalidad relacionada con drogas en nuestro país, alcanzó en 2020 las 974 defunciones. El documento observa un leve aumento de los opioides, cierto descenso de los Hipnosedantes y del Cannabis, además de un claro descenso de la Cocaína y el Alcohol. Este dato es relacionado con el Cannabis, enunciando que “está presente en 2020 en el 22,4% de las muertes por reacción aguda a drogas. En 2020 se notificaron 195 defunciones en las que el cannabis estaba presente, en 3 casos como sustancia única y, con independencia de la detección de otras sustancias, con alcohol en el 25,8% de estos casos, con cocaína en el 55,9%, con Hipnosedantes en el 62,7% y con opioides en el 66,5%”, exhibiendo de esta forma información sesgada.
Nuevas Sustancias Psicotrópicas
La confusión entre sustancias desde un organismo con la trayectoria de la OEDA, es inexplicable en cuestiones técnicas. Sin embargo, podemos apreciar cómo en la lista inicial, no solo aparecen como “nuevas” sustancias la Ketamina o la Ayahuasca, bien conocidas desde hace décadas. Además, mencionan el “Miau Miau” para a continuación mencionar la Mefedrona, siendo ambas sustancias la misma. Ocurre lo mismo con la “Flakka”, un tipo de Catinona, ambas mencionadas como sustancias distintas.
La confusión continúa con la mención de la tríada, “Cannabinoides Sintéticos, Marihuana Sintética y Spice”. Siendo que las tres denominaciones mal pretenden referirse a la misma sustancia, las autoridades de la OEDA han decidido tratarlas como tres nuevas sustancias distintas. Mientras que la correlación entre “Marihuana Sintética” podría guardar alguna relación con “spice”, sin embargo, no tiene por qué pasar por esta presentación herbal al respecto de los “Cannabinoides Sintéticos”, siendo una acepción más acertada según el experto Kenzy Riboulet, la de “neocannabinoides” para referirse al conjunto.
Desde el organismo, consideran nuevas sustancias psicoactivas (NSP) aquellas que imitan el efecto de drogas ilegales (Cannabis, Cocaína, Éxtasis, etc.), pero ello no es excusa para difundir el bulo de la correlación entre “Cocaína Rosa” o Tusibi, con la sustancia alucinógena 2CB-Nexus, una diferencia que aclararon en estas mismas páginas el representante de la asociación de prevención de riesgos, Energy Control, Claudio Vidal y el farmacólogo, José Carlos Bouso.
La detección de estas confusiones manifiestas en la elaboración del informe, no pueden entenderse al tratarse de una institución de dilatada experiencia como el PNSD. Los datos correspondientes al año corriente tendrán que esperar a una interpretación más acertada, en 2023.