Por Adryc Menellsön
Hola de nuevo amigas y amigos de esta verde mar de María. Seguimos hoy la singladura hablando sobre los distintos medios que podemos usar en nuestros cultivos de interior.
Como decíamos en el anterior capitulo los medios que usemos dependen en gran manera de la técnica de cultivo que empleemos; me explico, en sustrato podemos regar manualmente mientras que en hidropónico necesitamos riego por goteo o inmersión, pues no todos los medios tienen la misma capacidad para retener el líquido de riego con los nutrientes que lleva; por ejemplo el sustrato retiene la humedad tres o cuatro días sin que la planta necesite aporte alguno para crecer confortablemente, en contra la arlita drena rápido y necesita continuo aporte para que no se sequen las raíces; si no lo recibe, la planta durante esos mismos días sufrirá un grave carencia hídrica, se puede llegar a secar, con los consecuentes daños en la planta que afectarán a su producción final.
Es hora de ir acabando con el cultivo básico para adentrarnos en otras técnicas más complejas; pronto acabaremos con este apartado y comenzaremos a navegar por el cultivo hidropónico, será entonces cuando veamos los medios adecuados a dicha técnica.
Pero cada día este verde mundo nos sorprende con la aparición de algún producto nuevo o variedad nueva de planta; el sector cannábico amplía horizontes y cada día más gente se implica en el desarrollo de nuevos productos para el cultivo facilitándonos en gran manera nuestra labor de cultivadores libres, a la vez que busca una salida profesional en él.
Uno de ellos es la Cannalita, un medio de cultivo que mezcla le técnica de riego normal con una especie de sistema hidropónico por inmersión, básicamente es parecido al método tradicional holandés. Mezcla los dos conceptos de cultivo y es una buena manera para pasar de una técnica a otra. Su sistema es sencillo, llenamos el contendor de cannalita, ponemos la planta en ella, y el contenedor en una bandeja con dos o tres cms. de solución nutriente que cubra bien su fondo. El riego es por absorción y solo debemos preocuparnos de que nunca baje del nivel recomendado.
La Cannalita es un sustrato zeolítico, su nombre químico es Aluminosilicato microporoso, que ha sido activado mediante inmersión en una solución líquida especial a 30º C, ideada para el cultivo cannábico. Está pensado para ofrecernos un rendimiento máximo sin apenas esfuerzo, y sin necesidad de poseer conocimientos avanzados de cultivo.
Según sus productores es fruto de una larga investigación en campo y está basada en los estudios realizados por la N.A.S.A. en futuros cultivos en estaciones espaciales y bases lunares. Está desarrollada a partir de un mineral zeolítico, concretamente la clinoptilolita. Su tamaño es de entre 3 y 5 mm, y tiene una porosidad aparente de un 40º-50º, que proporciona una excelente aireación. Mediante un dopado selectivo del mismo a nivel molecular, y un posterior procesado, han conseguido que el mineral se adapte a las necesidades de cualquier cultivador.
Y ahora os vendo la burra al mismo precio que me la vendieron… Tiene los siguientes beneficios: Es un medio que permite una liberación lenta del abono, lo que nos da una excelente optimización de aportes al tener las plantas siempre nutridas; ello es debido al alto intercambio catiónico que favorece una mejor asimilación de los nutrientes y su efecto botijo que facilita una menor frecuencia de riego Siempre según sus productores, posee autorregulación del pH y de la EC. Con lo cual nos evitaríamos medidores, etc… Aunque eso, ahí cada cual. Y una cosa muy importante en estos tiempos que corren, dónde la policía sube tuits incitando a los vecinos que denuncien si el descansillo huele a marihuana, elimina los olores en el interior de nuestro indoor.
También es reutilizable, lo que la hace aceptable para el cultivo sostenible; fácil de lavar, Su mantenimiento consiste simplemente en limpiar el mismo con agua a presión, cada tres cosechas aproximadamente; dichas limpiezas no afectan a la activación realizada sobre el sustrato. Así mismo tiene un efecto fungicida, acaricida y bactericida. Una última ventaja es que nos ofrece un adelanto de la cosecha entre 1 y 2 semanas.
A mí me gusta escribir sobre mis cultivos y por tanto os contaré que he probado la primera versión de ella que salió al mercado. Pues bien, en un principio no me gustó nada, las plantas enraizaban regular y las plantas denotaban carencias; me costó cogerle el truco y los resultados no fueron buenos, para qué os voy a mentir.
Pero al Cesar lo que es del Cesar, la última versión de Cannalita es bastante mejor. Ha mejorado su estructura y la retención de humedad es mayor. Ahora mismo estoy efectuando una cosecha con ella de cuatro variedades feminizadas y su desarrollo es normal, como si estuviera cultivando en sustrato. Aún están en crecimiento, por lo que ya las veremos más adelante.
Vamos ahora a hablar un poco del trabajo de tester.
El trabajar como tester de un banco de semillas es un sueño para cualquier cultivador. Más, como es mi caso, si lo hace para un o de prestigio como es Buddha Seeds Bank. No hablo de dinero, hablo de la posibilidad que te ofrece de conocer de primera mano el desarrollo de una variedad, las sucesivas hibridaciones y sus consecuentes cambios de fenotipo hasta alcanzar la homogeneidad del ideal y una producción final más que aceptable. También te permite cultivarlas en diferentes condiciones de humedad o temperatura, jugar con los periodos de luz, acortando o alargando sus ciclos; en fin un amplio abanico de posibilidades, sobre todo para aquellos como yo, que disfrutamos casi tanto viendo crecer nuestras niñas como fumarlas.
Todo ello por supuesto debidamente documentado mediante material fotográfico y anotado todo en un documento de seguimiento de esa variedad con todos los datos de esa cosecha concreta. Los bancos utilizan esos datos para comprobar y comparar con los resultados obtenidos por ellos; cuando deciden que dicha variedad ya está lista para ser presentada al mundo, la sacan al mercado.
No creáis que es trabajo de pocos meses, algunas variedades se testan años antes de ser viables. Ningún banco serio se atrevería a sacar al mercado una variedad que no haya seguido dicho proceso de selección de hibridaciones. ¿Os imagináis que plantáis cinco semillas de una variedad y os sale dos de cada madre y una de padre desconocido…? , ¿O con una diferencia de tamaños que vayan de los 50 cm a los 180 cm…? Pues eso.
No se trata por tanto de un trabajo en el que pongamos 20 plantas a testar y enseñemos al banco las diez mejores plantas obviando el resto, pues no es eso lo que quiere el banco; este quiere todo, lo malo y lo bueno, pues quizá alguno, y no digo que lo haga, crea que el banco quiere ver buenas plantas y en un afán de agradar no enseñe las fallidas, provocando así que el banco al no disponer de esos datos concretos cometa un error de bulto.
Y me dejo ya de rollos e hilando lo anterior os voy a enseñar uno de mis últimos testeos, una variedad autofloreciente que llevo testando ya desde el finales del pasado año, y que yo llamo MIRE. Se trata de una variedad autoforeciente, polihíbrido de índicas, que será una bomba cuando salga si se sigue con la progresión que lleva. En este caso es la 4ª generación que testo, y como os dije antes, mi trabajo me permite efectuar diversas pruebas. Pues bien, en este en concreto puse a germinar 11 semillas, que germinaron todas correctamente a los dos días. Las puse a propagar cuatro días en tacos de goma Root iT y una vez aparecidos los cotiledones y las primeras hojas pasaron a sus contenedores.
Siempre he dicho que para obtener los mejores resultado de las variedades autos hay que ponerlas directamente en su contenedor definitivo, en esta ocasión de 10,8 litros. Pero llevaba tiempo pensando en qué pasaría si utilizase el método tradicional de enraizado y trasplante como las feminizadas. Así que, ni corto ni perezoso, puse ocho semillas germinadas en su contenedor definitivo y tres en contenedores de 500 cc.
Comenzaron su crecimiento con un fotoperiodo de 16 horas de luz por 8 horas de oscuridad normalmente, el tamaño de todas las plantas similar, pues esta variedad está ya muy estabilizada, entre las ocho y las tres. Pasados veinte días comprobé el cepellón de las tres, compacto y lleno de raíces y las trasplanté al contendor final similar a las otras ocho.
No voy a aburriros con los datos de todo el cultivo, solo el referido fotoperiodo, que la humedad relativa media durante todo él fue del 63%, que el abonado fue ajustado en pH y EC según las tablas para híbridos que ya os facilité aquí.
Ahora veamos que pasó. Pues que las plantas crecieron algo más que sus hermanas, casi 20 cms, estiradas, pero llenas de cogollos prietos y duros, incluso las infloraciones menores, ved las fotos de ellas, homogéneas. Quizá os parezcan que no son grandes cogollos, más eso sí, todo su abonado ha sido eco con mis propios abonos. Esto me ha dejado con la duda del trasplante o no de las autos, así que lo dejo en agenda, tomad nota.
Y nada más mundo, es un placer escribir para vosotras-os mas el espacio manda, y llega la hora de fumar mi Boong de #Syrup a vuestra salud. #LoMejoresHumos desde mi ensenada…