Benito Díaz
La pregunta parlamentaria realizada por el Partido Nacionalista Vasco hace unas semanas dio como resultado la respuesta del Gobierno de Coalición PSOE-Podemos: para la regulación del Cannabis Medicinal sería necesaria mayor investigación científica y pruebas clínicas. Esta contestación sacudió a la sociedad civil, en concreto a expertas y expertos en la materia, a cuya opinión nos referimos.
Desde Cannabis.es hemos contactado con un numeroso grupo de médicos, científicos, representantes políticos y plataformas de pacientes que han expresado sus pensamientos al respecto de la postura del gobierno, que ya ha producido que la agrupación vasca requiera la creación de un comité para analizar las investigaciones llevadas a cabo en países donde la regulación es una realidad.
Campo de Investigación
“El Cannabis Terapéutico y Medicinal debería estar regulado. No hay motivos para que no lo esté, tal como hacen en países de nuestro entorno. Una mejor regulación daría lugar a un mejor control, para garantizar un producto de óptima calidad, recetado por un médico, en una zona controlada como una consulta”, afirma Moisés García Arencibia, investigador científico y docente, responsable de análisis sobre el efecto de los Cannabinoides en enfermedades neurodegenerativas como el Párkinson o el Síndrome de RETT, además de participar hace unos días en las jornadas organizadas por el Observatorio Español del Cannabis Medicinal.
“Hay mucha investigación al respecto, no creo que sea cierto que no hay aval científico suficiente para regular. Es cierto que no hay tanto ensayos clínicos, como puede haberlos en lo relacionado con la efectividad de los Cannabinoides frente al Glioma, pero sí los hay en gran número en sus modos de uso para dolencias con las que el Cannabis puede ser útil como terapia complementaria”, explica Esther Martínez, investigadora sobre Cannabinoides, en la actualidad en Suiza.
“No queda más remedio que avanzar hacia la regulación del Cannabis Medicinal y Terapéutico”, declara Carlos Goicoechea, biólogo y catedrático de Farmacología. “No podemos discriminar lo que hacen los principios activos de la planta, dado que son muchos y varían de una planta a otra. Pensemos que regulan el uso de la Marihuana, ¿de qué fenotipo?, eso requiere un análisis minucioso. La aprobación de un medicamento requiere de un grupo de ensayo clínico, separado en quiénes toman el medicamento y quienes toman placebo. La garantía del estudio y la selección de pacientes dan lugar al medicamento, como sucedió con el Sativex. Hoy en día, es difícil saber qué se está consumiendo, por lo que pienso que es necesaria esta regulación para evitar un problema de salud pública”.
Los científicos coinciden en que hay suficiente investigación realizada, “20 años de análisis del Cannabis y derivados”, recuerda Goicoechea. “Se trata al final de un tema de contraste. Todos los estudios carecen de algún requisito de la Agencia Española del Medicamento y Productos sanitarios (AEMPS), como el número de participantes en la muestra, elección de placebo, etc. Esto nos revela un problema, pues cada vez hay más investigación, pero se obtienen pocas evidencias. Hay demostración de que funciona, pero el argumento es que no es prueba científica por falta de rigor, un círculo vicioso”.
Los investigadores también señalan la falta de financiación para este tipo de proyectos, tanto pública como privada y la dificultad para acceder a los compuestos activos. “Son empresas pequeñas o farmacéuticas las que facilitan los compuestos, que solo están disponibles con permisos concretos, justificados y especializados, solo dirigidos a la investigación”, refiere Martínez.
“No hay patrocinios de las farmacéuticas, tan solo están interesadas en estudiar los productos cuyas patentes poseen. Y la planta no se puede patentar”, aclara Goicoechea. García Arencibia y Martínez coinciden en recomendar la visita y revisión de la página de la Sociedad Española de Investigación sobre Cannabinoides (SEIC) donde pueden consultarse la información sobre avances en este tipo de proyectos en nuestro país.
Campo Médico
“Me parece muy necesaria la regulación del Cannabis. Es algo que existe y existirá, así que prefiero que sea legal a ilegal” declara Joan Carles March, médico especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, director de la Escuela de Pacientes y docente.
“La petición de evidencias científicas no permite avanzar, hace mucho que hablamos sobre este tema. Hay evidencias suficientes, aunque mejorables. Así, es necesaria más investigación y rigor que permita mejorar todo el proceso, que podrá ser aprovechado por personas a las que estas terapias les mejoran su calidad de vida”, declaró March, un punto que comparte su colega el Dr. Mario Land, Presidente de la Sociedad Clínica de Endocannabinología en España y Director Médico del Centro Médico Vita Santé.
«El problema es que hay que separar el aspecto político del aspecto de salud y bienestar. Dejaría de lado la política y me centraría en las necesidades que tienen cientos de pacientes que están usando Cannabis Terapéutico y lo declaran en público. No es una cuestión del proyecto de un grupo político, es una petición que viene de la mano de asociaciones de enfermos que lo consumen y asumen su efectividad, pues buscan una regulación en la legalidad por parte del Gobierno, que les permita consumir y mejorar su calidad de vida”, sostiene Land.
“Hay que avanzar en abrir nuevas líneas de investigación, financiar proyectos como el del Herpes Zoster, el análisis de la ayuda que podría brindar el Cannabis frente al uso de Cocaína” explica March, que, en conjunción con los investigadores, reclama más inversión en investigación científica, favorecida desde instituciones públicas y el Estado. “Como apuntamos en las charlas del OECM, hay evidencias, pero esto debe llevar a un proceso práctico, no a una teoría: si gana el sí, hay que ponerlo en marcha. La situación actual parece revelar cierto miedo a tomar decisiones valientes, pero hay que serlo para poder avanzar”, concluye el Dr. March.
En consonancia, “¿tenemos que esperar a que se solucione un tema de acuerdos políticos para solucionar un problema de salud? Creo que no. El debate no debería someterse solo a aportar evidencias científicas o no, debe haber conciencia política para regular un producto, pues el Gobierno sabe que la Unión Europea puede darle permiso. Colabora con Alemania, colaboran con Suiza, colaboran con Italia, colaboran con Canadá, vía Inglaterra, es decir, hay muchas evidencias e investigación, si el Gobierno las quiere ya. Pero no podemos reducirlo a un enfoque solo político. Hay evidencia en España, hay asociaciones de enfermos que dicen que sí. No podemos estar esperando otros tres años”, resuelve el Dr. Land.
Pacientes
Existen multitud de asociaciones y clubes cannábicos, formadas por pacientes que usan la planta de forma terapéutica, como Dosemociones o Terapéuticas Yerbas Castelló. En esta ocasión, nos acompaña Queralt Prat, responsable de la Unión de Pacientes por la Regulación del Cannabis.
“No se entiende que se tengan a más de 300.000 personas, consumidoras por motivos terapéuticos, esperando sin ofrecer ningún tipo de garantías sanitarias, de continuidad de tratamiento, sin regular el Cannabis Medicinal-Terapéutico. No se ofrecen razones más allá de la carencia de evidencias científicas, cuando el trabajo del Gobierno es regular este tipo de mercados para que dejen de ser peligrosos. Decenas de países ya lo han hecho, no pueden excusarse con esos argumentos, cuando tienen un 89% de la población a favor de estas terapias”, reclama Prat. “Esta argumentación sería válida hace 20 años, cuando era cierto que no había tanta información como ahora”.
La representante continúa diciendo que “No tiene sentido lo que afirma el PSOE. Siempre es necesaria más investigación, no solo en el Cannabis, también en opioides, en benzodiacepinas y muchas otras, sin embargo, para éstas sí hay regulación. Mientras tanto, hay 350.000 epilépticos que podrían beneficiarse de terapias con Cannabis”. Prat comenta que conoce muchos estudios en no-humanos, pero pocos en el lado opuesto, “si existen, deben ser muy pequeños o en la Asociación habríamos oído hablar de ellos”. Queralt añade que Podemos, el socio de gobierno del PSOE, estaba trabajando en una propuesta de regulación para su debate en la segunda parte de la legislatura. Un proyecto que “nadie ha visto” y cuya consecución no sabe si el Partido Socialista permitirá.
Políticos
La cuestión del Cannabis ha sido tratada por casi todos los grupos políticos del congreso. Al ser imposible reunirlos a todos aquí, debemos inclinarnos por aquellos que nos ha ofrecido mayor accesibilidad, contando hoy con las declaraciones de Jorge Moruno, representante de Más Madrid.
“El problema puede encontrarse en el planteamiento del PSOE, que ha mostrado en las charlas y debates. Persigue un consenso vacío, en el que se escuda para excusarse ante las peticiones de regulación del Cannabis Terapéutico-Medicinal. Su mezcla de conceptos es notable, por ejemplo, en la intervención del otro día, donde dijeron que mezclábamos el Cannabis Recreativo, cosa que no hizo nadie salvo ellos”, expone el diputado. “El PSOE exhibe una posición retrógrada frente a los avances de otros países, como México o Italia. Nos sorprende que haya una parte de la población que esté de acuerdo con esto. También se muestra poco receptivo frente a las peticiones de los pacientes, miles de personas que están sufriendo enfermedades y dolor crónico. Eso convierte en inexplicable la concesión de permisos a empresas extranjeras con núcleos en paraísos fiscales”, rememora Moruno.
“Cabría preguntarse por la voluntad política para la regulación que existía en otros países, como Austria. Para llegar a una regulación, el consejo de Gobierno debe tener la intención de abordarla, al menos. ¿Cuál es el problema? Vamos en dirección contraria, no explorar los efectos terapéuticos y medicinales del Cannabis es un gran error. Además, siendo una medida que cuenta con gran mayoría de apoyo entre la ciudadanía, creo que sería una normativa que no tirarían atrás, una vez aprobada” resume el representante de Más Madrid. En este punto, volvemos a coincidir con los investigadores, al reclamar Moruno más impulso público en el análisis científico, puesto que “España puede ser puntera en investigación, en la creación de industria y creación de empleo, también en la nacionalización de esa riqueza, fomentando las cooperativas y las empresas locales”. Concluye que la regulación a nivel integral, traería garantías de mínimos de calidad y contribuiría a proteger a los jóvenes contra la oferta ilegal.